Monday 31 August 2009

Pobre mundo enfermo.

Tendría unos 14 años, e iba solo por el centro de la ciudad.
Pensativo, observador como ninguno.
Tenía una mirada hipnótica, como si pudiera atravesar los cuerpos de las personas y examinar su interior.


Se paró delante de un puesto donde un hombre de color vendía pulseras y anillos hechos con suma paciencia. En ese momento, pasó un chico justo al lado de él, corriendo hacia el puesto.
Cogió una caja de pulseras y salió corriendo no sin antes decir "jódete negraco", las piernas del pobre dependiente no consiguieron darle alcance y se vio de rodillas en el suelo llorando ante la impotencia.


Pensando en lo que habían visto sus ojos, el niño siguió caminando hacia el paseo marítimo, nada más entrar, vio a un niño llorando sentado en el primer banco.
-¿Qué te pasa?
- Me he perdido... snif. No se donde está mi mamá.
- No te preocupes...
No llegó a acabar la frase y vio a una mujer corriendo hacia donde estaban, iba discutiendo al mismo tiempo por el móbil. Cojió al niño de la mano y arrastrándolo se alejaron entre los llantos del niño y los gritos de su madre.


Sin comprender nada de lo que estaba ocurriendo se alejó a la zona de las tiendas. Estaba llena de gente que iba y venía, con bolsas de todo tipo. Entre el bullicio pudo ver a una anciana que quería entrar en una tienda de zapatos. Llevaba el carro de la compra y se apoyaba en una vara. Justo cuando iba a subir el escalón que la conduciría al interior de la tienda, alguien le golpeó por detrás su carrito, la vara tembló ante su mano y cayó al suelo.
Nadie, ni un alma se detuvo a ayudar a la pobre mujer que intentaba recoger su vara para levantarse.
Corriendo, el niño, cruzó la calle y le tendió una mano y una sonrisa.
La anciana las aceptó y entre los dos consiguieron que volviera a ponerse en pie.
Pudo ver cómo lecaían las lágrimas a la pobre mujer... Mientras se las limpiaba se acercó al niño, le revoloteó el pelo, intentó sonreirle y se dirigió al interior de la zapatería.


"Ya basta, ya he visto demasiado".
Se dirigió hacía el faro de la costa de la ciudad para estar solo pensando como es posible que en el mundo hubieran personas así.
En menos de una hora había experimentado lo que era la incomprensión, el racismo, la indiferencia, la despreocupación, la desesperanza.
Aquello no le gustaba. No volvería a ese lugar donde las personas se hacían daño las unas a las otras sin importarles nada más que sus propias vidas.
Sentía impotencia por no poder cambiar el mundo.
Se sentó en una roca junto al faro.
Por primera vez, comenzó a llorar... Sacó sus alas blancas y echó a volar.


No volvería a ese mundo de sufrimientos sin sentido....

11 comments:

Marisol Cragg de Mark said...

La naturaleza del ser humano es así con sus dos caras... hay que saber vivir con ellas dos aunque nos desagraden. Tu cuento me gustó.

Aquí te dejo este enlace de otro blog mío: http://loscuentosdemarisol.blogspot.com
A ver qué te parece.

Recibe muchos saludos desde Berlín.

Anonymous said...

Ale niño, me ha encantado, me ha fascinado, me ha dejado impresionado. no me esperaba un final así. Que mundo este más cruel, más, visto desde los ojos de un niño, que debería ver ejemplos y buenas acciones...

Un besito cielo

Marina-Emer said...

hay que ver la crueldad de la vida ...me gusto mucho el texto
un abrazo
Marina

una más... said...

Vaya.. sabes? creo que ese ángel no debería haber volado.. sin ángeles en la tierra, nada de lo que vió cambiará..son necesarios.
Un beso enorme..y " chapó " por esto..me ha encantado.

I said...

Vale que esté un poco sensible pero se me han saltado las lágrimas.
No puedo estar más de acuerdo con lo que has escrito. Ya nadie se preocupa por nadie, todos pendientes de sus ombligos sin decir nada más que yo, yo y yo.

Haría falta algo más que una tarde de ejercicio o un saco de boxeo para calmar la rabia que me produce ser consciente de que ahora esto es lo habitual.

No se me ocurre otra cosa que citar a Hobbes y su "el hombre es un lobo para el hombre".

Un besito David!

C. said...

Tengo el dia un poco sensible y acabo de leer esto... pufff... Ojalá pudierammos evitar las cosas malas de este mundo y hacer que fuera muchisimo mejor; pero el mundo humano evoluciona y empeora y su ritmo es dificil de parar. Lo único que podemmos hacer es cambiar nuestros comportamientos y así intentar cambiar nuestra parte, poner nuestro granito de arena en esta enorma montaña.

Esta entrada me ha gustado muchisimo, me ha llegado muy dentro y sobre todo por el tema qué es. Tienes una forma de escribir que dice mucho de ti (a parte de los temas que puedas escoger)

Cuidate guapo;)
Un beesiiin.

· N u b b i e s · said...

No se puede decir nada m´s de lo que ya han dicho. Vivimos en un muno podrido y egoísta a más no poder.

Tu relato me ha conmovido. Y es cierto lo que dice "una más" Sin ángeles como esos en el mundo solo nos van a quedar ls pirañas. Necesitamos más ángeles, y serlo solo depende de nosotros.

Cuídate.

Ángel.

Melancholia said...

Desde luego estas rozando lo más profundo del alma...me encanta que no te quedes en la superficie ay es que salgo de aqui emocionadita..perdona mi ausencia..soy una descuidadilla ...
Otra vez te felicito
Y gracias a mi no..a ti por comentarme y asi te encontre yo a ti xD que lio no?
Besos

Anita Pidre said...

Me gusto mucho tu blog, y lo qe pones :) te felicito !!
Un besito grande

David said...

No te voy a decir nada más que.... jopé que bonito.

Yo tengo un ángel en casa.

Allek said...

hola! pasaba a invitarte a pasar a mi caja!
un abrazo !!!

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